
03 Nov MARRAKECH
“Marrakech” (Dominique Ehrhard – Gigamic) es un interesante juego familiar, de esos que puedes sacar a mesa con niños, con los abuelos, con ese amigo que viene de visita y que no suele jugar a nada y al que te apetece sorprender con un juego. Sencillo, vistoso, de partidas rápidas.
Para empezar, la caja ya llama la atención por su preciosa ilustración. Y es que la editorial acertó cambiando el diseño original por una ilustración de la gran Marie Cardouat, cuyo trabajo más conocido (al menos en el mundillo jugón) son las maravillosas ilustraciones de “Dixit”.
Y cuando abres la caja te encuentras con el llamativo material de juego, con la habitual calidad de la editorial Gigamic, especializada en juegos abstractos y que suele utilizar la madera como elemento primordial. En este caso, la madera es para las monedas y la ficha principal del vendedor. El material de juego son pequeñas alfombras de tela que vamos a ir utilizando sobre el tablero.
La mecánica del juego es muy sencilla:
El vendedor, al que llamaremos Assam, se mueve por el espacio que puede representar una tienda de alfombras en un mercado oriental. Para ello el jugador en turno lanza un dado que hará que Assam se mueva entre 1 y 4 casillas, en linea recta. Antes de lanzar el dado, el jugador debe decidir si Assam seguirá moviendo en la misma dirección que llevaba, o girará 90º a la derecha o a la izquierda antes de echarse a andar. Esta decisión es importante ya que si al finalizar su movimiento Assam se encuentra sobre una alfombra de otro jugador, nos tocará pagar a ese jugador un número de monedas que depende de la cantidad de medias alfombras conectadas del mismo color.

En este caso, si Assam ha acabado su movimiento, el jugador en turno deberá pagar al dueño de las alfombras marrones un total de 2 dirham. Seguidamente, el jugador decidirá donde pone Assam una de sus propias alfombras
Una vez hecho esto, el jugador en turno hace que Assam extienda una de sus alfombras en una casilla adyacente ortogonalmente al vendedor, con la que podemos tapar parcialmente una o dos alfombras de otros jugadores, porque lo que interesa es que se vea el mayor número de nuestras alfombras posible, y si podemos conseguir que estén conectadas unas a otras, mucho mejor.
Cada jugador comienza la partida con 15 alfombras y 30 monedas, finalizando la partida cuando la última alfombra ha sido colocada. Por cada mitad de alfombra que un jugador tenga a la vista, gana 1 punto, a lo que hay que sumar el número de monedas que le queden.
Así es “Marrakech”, un juego muy agradable de jugar y que recomendamos para todos aquellos grupos que disfruten de los juegos sencillos, vistosos y con ese aire de juego para toda la vida. El juego ha sido galardonado con varios premios a nivel internacional, siendo el más destacado el As d’or en 2008.
Cristian
Posted at 22:34h, 03 noviembreA mí me parece un juego muy bonito y bien parido. La verdad es que me sorprendió ^_^. Lo tengo reseñeado en mi blog, por si alguien quiere echarle un vistazo.
¡Un Saludo!
JugarXJugar_alf
Posted at 00:10h, 07 noviembreEs un juego muy elegante, uno de los destacados en el cat´logo de Gigamic.