
Los coches de bomberos son rojos, los cascos son amarillos y los árboles son verdes ¡eso lo sabe cualquier niño!
Con este divertido tablero de motricidad, los peques trabajarán el reconocimiento de colores y formas, gracias a que el tablero es reversible.
Este tablero potencia además la motricidad fina, ya que tendremos que desplazar por el laberinto las piezas de colores para llevarlas de un sitio a otro.